This artwork, created by Roberto Carter Carreras, was the cover of Blanco y Negro magazine thanks to the "Cover Contest" held by the magazine, which allowed emerging or unrecognized artists to have their works published on the front page of one of the country’s most important magazines.
Specifically, in this case, Carter Carreras depicts a high-society couple from the early 20th century. They are having tea, she is taking the opportunity to read the newspaper (which indicates her social status as an educated woman), and he is smoking a cigar while keeping her company. Both are wearing hats. In his case, he is wearing a top hat, a symbol of male elegance, invented in 1797. In her case, she is wearing a hat with a geometric shape indicating modernity. From 1910, hats grew in size and featured such whimsical designs that jokes about them began to emerge. Over time, and with rapidly evolving fashion in those years, hats changed, their brims shortened, approaching the style of 1920s hats but also becoming angular and pointed, with exaggerated and modern shapes that attracted attention.
ES
Esta obra, realizada por Roberto Carter Carreras, fue portada de la revista Blanco y Negro gracias al «Concurso de Portadas» realizado por la revista, y gracias al cual, artistas que estaban empezando o no tenían una carrera reconocida, podían ver publicadas sus obras en primera plana de una de las revistas más importantes del país.
En concreto, en este caso Carter Carreras refleja a una pareja de la alta sociedad de comienzos del siglo XX. Están tomando el té, ella aprovecha para leer la prensa (lo que nos indica su nivel social ya que es una mujer que ha recibido educación) y el está fumando un cigarro mientras la acompaña. Ambos van tocados con sendos sombreros. En el caso de él, lleva una chistera, un sombrero de copa símbolo de la elegancia masculina, inventado en 1797. Y en el caso de ella un sombrero con una forma geométrica que indica modernidad. A partir de 1910 los sombreros crecen tanto de tamaño y llevan tocados de tanta fantasía que empiezan a surgir los chistes en torno a ellos. Con el tiempo y la moda que evoluciona muy rápido en estos años, van cambiando, se acortan las alas y se van acercando al modelo de sombrero de los años 20, pero también se hacen angulosos y picudos, con formas exageradas y modernas que llaman la atención.